El Proceso de Censura en la Nueva España: Un Acercamiento | Blog UVP

El Proceso de Censura en la Nueva España: Un Acercamiento

Por : Comunicación y Eventos

Por: Aldo Jhonatan Medina Ceballos

Coordinación de Extensión Universitaria

La cultura de la censura actualmente es un tema frecuente en el mundo de los espectáculos, la política y la sociedad misma, sin embargo, dentro de nuestro territorio mexicano, se establece desde la época de la Nueva España, específicamente con la llegada de la imprenta al continente Americano, la cual no sólo permitió que se diera la conquista ideológica a lo largo del continente, sino que también sirvió como punto de partida para la censura de ciertos temas e ideologías que no entran en el marco de referencia novohispano. Por ello surge un sistema de licencias, que permitían a ciertos individuos selectos la facultad de generar publicaciones; estas licencias de publicación en la Nueva España eran dadas a los impresores, sin embargo, éstas debían de pasar por un proceso de análisis para que pudieran ser publicadas. Este proceso se le conoce como censura, pero no se debe entender en el sentido de prohibición respecto a algo en concreto, sino como un proceso de análisis de la obra, en la que se pondrán a prueba los distintos puntos clave del libro: el contenido, la encuadernación y la temática.

Este proceso de censura surge para hacer una regulación en los escritos impresos de la época, dejando afuera a muchos de los que no estaban en una relación estrecha con lo que estipulaba el clero. Así que muchos de los libros que querían fueran a ser publicados, debían de estar dentro de los lineamientos canónicos de la Iglesia, de lo contrario, tras el análisis riguroso de los materiales, éstos eran rechazados.

Los impresores buscaban fomentar la lectura, por lo que muchas de sus publicaciones iban en relación con aquello que la Corona quería que el pueblo y los de la Nueva España supieran acerca del mundo, por lo tanto los temas principales de los libros no tenían una variación amplia, sino que todos o al menos la gran mayoría de ellos se enfocaban en materia eclesiástica, para que sirviera de cierta forma como material de apoyo o herramienta a los evangelizadores españoles, así como también, un soporte extra para aquellos que ya estaban letrados en la cultura europea. 

A pesar de lo que podría creerse, las licencias de impresión en la Nueva España eran bastante cotizadas y no había demasiadas de éstas, por lo que entre los años de 1748 y 1770 sólo se otorgaron alrededor de 47 de éstas, siendo cada vez más escasas por parte de los europeos. Los que solicitaban estas licencias de impresión debían esperar al proceso de censura para que les autorizará la impresión del contenido de sus obras, así como también el tiempo de análisis que requería cada uno de los materiales.

Mientras tanto, los autores de los libros, muchas veces, sino es que tal vez siempre, eran sometidos a análisis de censura en lo referente a sus publicaciones, y de fallar en esta prueba, no podrían publicar absolutamente nada.

 

BIBLIOGRAFÍA

Serrano, A. (1995). Establecimiento de la primera imprenta en México. Siglo XVIII. En: Tesoros bibliográficos mexicanos: México: primera imprenta de América (p. 53 – 59). México: UNAM.

Zúñiga, M.(2002). Licencias para imprimir libros en la Nueva España. En: Del autor al lector (p. 163 – 181). México: CIESAS.